Tener la plancha más sofisticada, contar con un centro de planchado que reúna tecnología punta, o una plancha vertical de última generación, no garantiza que tu ropa tenga el mejor acabado para ir siempre de punta en blanco.
Planchar es una técnica milenaria que se ha ido perfeccionando con el tiempo, el análisis y la combinación de las mejores prácticas y lecciones aprendidas de cómo se comportan los diferentes textiles frente al calor en el momento de alisarlos, o cuál es la mejor manera para hacerlo.
Te revelamos las técnicas apropiadas para emplear tu plancha favorita, ya sea una plancha para ropa, una plancha vertical o un centro de planchado a vapor, para obtener siempre los mejores resultados.
¿Cómo planchar? Consejos generales y guía paso a paso
Al planchar las largas cadenas de moléculas que forman los tejidos de la ropa se suavizan y relajan, acabando con las arrugas. Originalmente esto era el resultado del calor y el peso de la plancha. El uso del vapor ha mejorado y facilitado el proceso ya que penetra con mayor facilidad en el tejido de la ropa, aumentando su temperatura rápidamente y eliminando las arrugas con menos esfuerzo que con el planchado convencional.
Al planchar ayudas a mantener la forma y apariencia impecable de la ropa; eliminas restos de humedad, que puede ocasionar malos olores y matas gérmenes, moho o cualquier otro tipo de microorganismo conviviendo dentro del tejido, evitando que vuelvan a crecer.
Además de la mejor plancha, hay accesorios indispensables y conocimientos que debes tener.
Tu tabla de planchar: La base para un planchado eficiente
Si buscas resultados profesionales es importante contar con todos los complementos apropiados y algo que no puede faltar es una buena tabla de planchar, sobre todo si empleas un centro de planchado.
La tabla de planchar proporciona la superficie idónea para planchar. Está compuesta de una estructura metálica que le confiere rigidez y estabilidad. También suele ir acompañada de una funda textil acolchada, que retiene la humedad y ayuda a su vez en la transferencia del calor para facilitar el proceso. Además:
- La parte metálica presenta perforaciones que ayudan a ventilar el material textil que la recubre. Si usas un centro de planchado las perforaciones facilitan el paso de vapor y evita que se condense sobre la superficie de la tabla.
- Las tablas de planchar son amplias en un extremo y tiene punta cónica del lado opuesto: Este diseño facilita el acceso de pequeñas partes de las prendas de ropa y ayuda a planchar los diferentes diseños. Para ser más precisos puedes adquirir un “manguero”, o tabla para planchar mangas. Está especialmente diseñado para el planchado de las mangas, la parte superior de los pantalones y algunas prendas pequeñas de difícil manipulación .
- Las patas plegables facilitan su cierre para guardarlas; también permiten ajustar la altura, manejando por lo general 3 niveles diferentes.
Si usas centro de planchado tal vez es bueno que adquieras una tabla de planchar con aspiración; ejercen un efecto de succión leve sobre los tejidos, permitiendo que mejore la transferencia del calor y facilitando la penetración del vapor en los tejidos de la ropa.
❗ Importante: Si eres diestro el extremo cónico, o punta, de la tabla de planchar, debe estar colocado a tu izquierda ya que sobre el lado más amplio tendrás el espacio suficiente para colocar la plancha.
Conociendo tu ropa: El secreto en las etiquetas
Las empresas que elaboran prendas de vestir están obligadas a cumplir regulaciones de indicar en las etiquetas las recomendaciones de conservación para los diferentes textiles. Esto lo hacen mediante distintos tipos de símbolos, los cuales se encuentran regulados mediante la normas UNE-EN ISO 3758: 2012 V2.
Esta regulación abarca los diferentes procedimientos que se realizan sobre la ropa en relación al lavado, uso de blanqueador, secado y planchado. Respecto al planchado incluye los rangos de temperatura recomendados de acuerdo al tipo de textil, o informa cuándo no es conveniente recurrir a la plancha.
Por todo ello, las etiquetas son tu mejor aliado para ampliar la vida útil de tu ropa.
Guía para planchar paso a paso
Antes de empezar a planchar necesitas reunir los utensilios necesarios para sacar el mejor rendimiento y en menos tiempo:
- Prepara el lugar para planchar. Si usas tabla de planchar ajusta su altura y asegúrate de orientarla apropiadamente.
- Clasifica y separa las diferentes prendas, de acuerdo al tipo de textil, no es lo mismo planchar una camiseta que planchar cortinas por ejemplo. Si tienes dudas recurre a la información de las etiquetas.
- Empieza enchufando la plancha y ajusta la temperatura más baja de acuerdo al tipo de textiles identificados entre las prendas a planchar.
- Evita dejar apoyada la plancha directamente sobre la tela. Cuando no planches deja el electrodoméstico colocado sobre su base, o la tabla en posición vertical.
- Comienza a planchar aprovechando las diferentes instrucciones que te dejamos más adelante, de acuerdo a cada tipo de prenda.
- Cuelga la ropa en perchas y déjalas enfriar para así evitar arrugas antes de guardarlas en el armario.
¿Cómo planchar con plancha vertical a vapor?
Las planchas verticales a vapor, cepillos de vapor o vaporeras, emplean el calor generado por el vapor como el medio principal para eliminar las arrugas. El vapor penetra la fibra de la ropa con mayor facilidad y la relaja para facilitar el planchado.
Solo en el caso de prendas plisadas, o con la raya de algún pantalón, no se obtendrán los resultados esperados, pero aplicando las técnicas adecuadas es posible alcanzar siempre los mejores acabados en cualquier tipo de ropa.
- Coloca la prenda a planchar en una percha sobre un soporte estable.
- Sostén la boquilla de la plancha vertical con la mano derecha y prueba el funcionamiento del dispositivo, accionándolo un par de veces lejos de la ropa.
- Manteniendo la boquilla de la plancha separada solo unos pocos centímetros de la ropa empieza a rociar el vapor con movimientos verticales, de arriba hacia abajo.
- Realiza varias pasadas hasta que compruebes la desaparición de las arrugas.
- Puedes ayudarte en el proceso estirando el tejido con tu mano libre, aumentando la eficiencia del planchado. Ten cuidado de no aplicar vapor sobre tu otra mano o ante la duda utiliza un guante protector.
- Repite el proceso sobre las diferentes partes de la ropa: mangas, espalda y bolsillos. Toma tus precauciones para los textiles más gruesos, o las zonas que se encuentran más arrugadas, que pueden necesitar más pasadas.
- Aprovecha los diferentes modos de la plancha para alcanzar las presiones adecuadas para planchar eficientemente los distintos tipos de telas.
¿Cómo planchar con un centro de planchado?
El empleo del centro de planchado a vapor no difiere al de una plancha de vapor convencional, pero es conveniente que tengas en cuenta indicaciones adicionales debido a que la presión y el volumen de vapor que se genera es mucho mayor, lo que se traduce tiempos de planchado más cortos.
Además, la base que representa el soporte del funcionamiento del centro de planchado ocupa un lugar importante y es conveniente que tengas un apoyo independiente, fuera de la superficie de la tabla de planchado.
- Confirma que la suela de la plancha se encuentra limpia y el depósito de agua está lleno, teniendo en cuenta las indicaciones del fabricante.
- Coloca el calderín sobre una superficie firme, que no represente riesgo para ti.
- Conecta la plancha a una fuente de alimentación eléctrica y enciéndela ajustando el programa de planchado de acuerdo al tipo de tejido. Empieza siempre con los programas que representan las menores temperaturas y cambia en la medida que necesites aumentarla.
- Ajusta el nivel de vapor según la temperatura seleccionada. Para bajar temperaturas la presión no será suficiente para generar vapor, así que si accionas el vapor estarás rociando agua sobre la ropa.
- Cuando la luz indicativa determine que ya se está preparada según las condiciones marcadas puedes empezar a planchar.
- Coloca la ropa sobre la tabla y retira la plancha del calderín.
- Para cambiar la posición de la ropa sobre la tabla de planchar asegúrate de colocar la plancha nuevamente sobre la base.
- Cambia los programas de planchado y la temperatura según avances hacia los textiles más pesados.
- Libera el vapor cuando lo necesites.
Una vez termines de planchar asegúrate de hacer el mantenimiento apropiado de tu electrodoméstico. ¿Sabes cómo limpiar tu centro de planchado?