Planchar una falda no es muy complicado, solo tienes que introducirla en la tabla e ir dándole la vuelta mientras planchas. El problema viene cuando la falta es plisada, tiene una forma concreta o un tejido delicado.
Pero, tranquila, en este artículo te voy a dar algunos trucos para saber cómo planchar una falda fácil, porque tengo consejos para todas. ¡Luce tus faldas sin ninguna arruga!
¿Cómo planchar una falda plisada fácil?
Seguro que cuando compraste esa falda de gasa nunca pensaste que tenías que lavar y mucho menos planchar el plisado. Ten en cuenta los diferentes tejidos y ajusta tu plancha de ropa a la temperatura adecuada para cada uno, el procedimiento que te voy a mostrar va a ser prácticamente el mismo.
Paso 1. Coloca la falda en la tabla.
Mete la falda en la tabla de planchar mantenimiento la cintura en el extremo cónico y estirando el otro extremo sobre la tabla con ayuda de las manos. La idea es que no se planche en doble tejido.
Si tu falda no cabe en la tabla por su forma, puedes desabrocharla si tiene botones o plancharla con cuidado para que no se formen arrugas.
Paso 2. Identifica los pliegues
Empieza planchando la cintura en todo su recorrido con ayuda de la punta de la plancha. Después identifica los pliegues naturales de la falda y fija un alfiler en la zona del dobladillo, sobre la tabla de planchar, tratando de mantener la forma del plisado. El alfiler te sirve para varios pliegues, dependiendo de lo estrecho que sea el diseño de la falda.
Si la falda tiene forro, plánchalo antes de trabajar los pliegues.
Paso 3. Plancha marcando el plisado
Trata de cubrir el área que tienes frente a ti y estira de la cintura para marcar los pliegues en paralelo. Plancha aplicando solo la punta de la plancha para tener el control. También rocía agua fría si tiene arrugas intensas y el tejido lo permite; no te aconsejo el vapor de agua caliente porque puede eliminar el plisado si es muy fino.
Lo mejor siempre es marcar los pliegues con la plancha convencional, pero si se hace muy complicado acude a una plancha vertical.
Hay faldas con pliegues mucho más anchos, como las faldas escolares, que son más fáciles, pero igual debes ir moviéndote pliegue por pliegue y dándole la vuelta sobre la tabla de planchar.
¿Cómo planchar las tablas de una falda?
Lo primero, al igual que en el resto de faldas, es mirar el etiquetado para ver cuál es la temperatura que soporta el tejido y si permite o no el vapor de agua.
Las faldas de tablas no se diferencian mucho de las plisadas, en ambas debes respetar los pliegues y planchar siguiendo su forma. Para ello te puedes ayudar de alfileres, después solo tienes que pasar la plancha por el centro marcando bien la tabla.
¡No planches si no has marcado antes!, pues tienes el riesgo de hacer desaparecer el pliegue. Da pasadas cortas, controlando de arriba abajo y nunca de lado a lado.
Repite el proceso moviendo la falda hasta que quede totalmente planchada. Al final, cuelga tu prenda en una percha y procura que no quede aplastada en tu armario por otras prendas. Dale algo de espacio.
¿Cómo planchar una falda de cuero?
En este caso, no es tan importante la técnica de planchado sino el respeto del tejido, pues es muy delicado. De hecho, en muchas ocasiones hay prendas de cuero que prohíben en el etiquetado usar la plancha convencional, en cuyo caso puedes usar vapor de agua o incluso nada. Lo bueno del cuero es que no se arruga con tanta facilidad como otros.
Si tu falda te permite plancharla, hazlo con cuidado:
- Plancha del revés para no estropear el cuero con la placa.
- Coloca un trapo o paño de algodón suave debajo de la falda.
- Usa temperaturas bajas o medias, pero nunca la máxima potencia.
- Da pasadas rápidas sin quedarte demasiado tiempo planchado una misma zona.
- Y no presiones o hagas fuerza con la plancha.
Si quieres darle un mejor aspecto a tu prenda de cuero, puedes untarle un poco de aceite de ricino o vaselina.
¿Cómo planchar una falda de colegio?
Normalmente las faldas escolares son de tablas, por lo que es conveniente respetar los pliegues. Además de los trucos que hemos visto antes para este tipo de faldas, te aconsejo usar un paño húmedo entre la falta y la plancha. Esto sirve para que las tablas queden mejor definidas y no se formen brillos en el tejido, como suele pasar en los uniformes.
Solo tienes que irlo moviendo conforme vas planchando cada pliegue y evitar que se seque. Este tip es perfecto si el tejido es delicado, porque la plancha nunca llega a tocar la prenda.
¿Cómo planchar una falda de polipiel?
A diferencia de las faldas de cuero natural, el polipiel o el cuero sintético es bastante fácil de planchar. Se plancha igualmente del revés con una temperatura media y vapor de agua. En una o dos pasadas rápidas se queda totalmente liso.
Te aconsejo que no ejerzas presión y no la acerques demasiado a la prenda para no quemarla. Y plánchala en una sola dirección para no hacer arrugas.
¿Cómo planchar una falda de tul?
El tul es uno de los tejidos que más se arrugan, por eso es importante que previamente las evites. Por ejemplo, no hagas lavados muy largos, seca la prenda colgada en una percha y aprovecha el vapor de agua para quitar las arrugas más marcadas.
Para plancharla siempre debes usar vapor de agua, no la planches en seco. Extiende la falda y métela dentro de la tabla, si se puede, para plancharla con más facilidad. Después solo tienes que dar pasadas por encima, pero ¡sin tocar! Da un par de centímetros de distancia y deja que el vapor caliente alise las arrugas.
En este caso, las estaciones de planchado o incluso los centros para planchado vertical son una gran opción.
¿Cómo planchar una falda de lino?
Al igual que el tul, el lino es una prenda muy ligera y fresca, pero que tiene mucha facilidad para arrugarse. Lo mejor es hacerlo con vapor de agua o incluso cuando la prenda aún está húmeda. Además, usar una temperatura alta, pues el lino lo soporta bastante bien.
Con esos dos consejos, la falda te quedará planchada en unos minutos. No estés mucho tiempo planchando, porque cuanto más la muevas, más probable es que salgan nuevas arrugas.
Si tu falta incorpora algún bordado, encaje o vinilo, pon siempre un paño suave encima para no plancharlo directamente y no apliques mucho calor.